Trabajo en equipo más allá de la mina: La electrizante carrera de Kevin en Lomas Bayas

Cuando era más joven, Kevin pensó en seguir los pasos de su padre y enlistarse en la Fuerza Aérea. Pero sus planes cambiaron cuando estaba estudiando electrónica en la escuela técnica y su grupo visitó Lomas Bayas de Glencore, una mina de cobre a cielo abierto ubicada al norte de Chile.

“Recuerdo que fue una visita que me abrió los ojos”, explica. “Nos enseñaron los riesgos de la electricidad, lo que no se puede ver, sino que solamente se puede sentir, y me di cuenta de que la electricidad me parecía fascinante”. 

Poco después de su visita, Kevin vio la oportunidad de unirse a Lomas Bayas como pasante. Hoy en día trabaja como Supervisor Eléctrico.

El equipo de Kevin es responsable del mantenimiento de los equipos utilizados para triturar el mineral de cobre como parte del proceso de producción en Lomas Bayas. Cada día comienza con una reunión con sus colegas para identificar las prioridades y asignar las tareas que deben ser realizadas para ayudar a garantizar que los componentes eléctricos de estas máquinas funcionen correctamente.

“La electricidad es vital para la producción de cobre. Sin el trabajo de mi equipo, Lomas Bayas podría sufrir cortes de electricidad. Nuestros equipos podrían dejar de funcionar y esto afectaría a los volúmenes de mineral que produce nuestra mina”.

El cobre es un metal versátil, puede ser utilizado en una gran variedad de productos electrónicos, así como en tecnologías de energías renovables y vehículos eléctricos. Como aleación, también resiste el calor y la corrosión, por lo que es muy adecuado para tuberías de suministro de agua dulce y piezas de plomería.

La seguridad es fundamental en el trabajo de Kevin y uno de los valores primordiales de Glencore. “Como supervisor, es mi responsabilidad asegurarme de que cada miembro de mi equipo regrese a casa con su familia sano y salvo”, explica.

A lo largo de los años, trabajar en turnos rotativos de siete días y lejos de casa significa que Kevin ha creado fuertes lazos con sus colegas. “Las amistades que he hecho en el trabajo continúan después de mi jornada”, explica. “No son solo amigos, son parte de mi familia”.

Kevin y sus colegas forman parte de un equipo de fútbol llamado Electric Shocks. Sus mayores rivales son los Mecánicos, también perteneciente a Lomas Bayas.

“No soy Messi, pero me gusta mucho el fútbol, es como un lenguaje universal», dice Kevin. “Jugar juntos nos ayuda a conocernos mejor, y eso nos une más en el campo de fútbol y en el trabajo”.

De cara al futuro, Kevin está entusiasmado con los trabajos en marcha en Lomas Bayas para aumentar la producción de cobre. También confía en la racha futbolística de los Electric Shocks. “Puede que los mecánicos corran más rápido que nosotros, pero tenemos mucho corazón”, explica.